¿Qué es la aerotermia y cómo funciona?

¿Qué es la aerotermia y cómo funciona?

La aerotermia lleva años revolucionando el consumo energético en los hogares españoles, por eso vamos a profundizar en qué es la aerotermia en una casa y cómo sacarle el máximo partido para disfrutar de la mejor temperatura durante todo el año eliminando el consumo de gas casi por completo y minimizando lo máximo posible la factura de luz.

¿Qué es la aerotermia?

La aerotermia es una tecnología innovadora de energía renovable que aprovecha la energía contenida en el aire para generar calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria en edificios residenciales y comerciales.

 

Este sistema se basa en el principio de la aerotermia, que permite extraer calor del aire exterior incluso en condiciones climáticas adversas, para después utilizarlo para calentar el interior de una vivienda. Esta forma de energía limpia y sostenible ha ganado popularidad en los últimos años debido a su alta eficiencia y bajo impacto ambiental.

¿Cómo funciona la aerotermia?

La tecnología de aerotermia funciona mediante un ciclo termodinámico que consta de cuatro etapas: evaporación, compresión, condensación y expansión:

 

  1. Primero, un refrigerante circula a través de un evaporador, donde absorbe el calor del aire exterior y se convierte en gas.
  2. Este gas a alta temperatura y presión se comprime mediante un compresor, lo que aumenta aún más su temperatura.
  3. El refrigerante caliente se dirige al condensador, donde cede su calor al agua del circuito de calefacción o al sistema de agua caliente sanitaria.
  4. Por último, el refrigerante se expande y vuelve a su estado gaseoso inicial, reiniciando el ciclo.

Ventajas y desventajas de la energía aerotérmica

Conocer los beneficios y posibles contras de los sistemas de aerotermia es crucial antes de dar el paso de instalar un sistema de estas características:

 

Entre sus principales ventajas se encuentran estas:

  • Sostenibilidad ambiental: La aerotermia es una fuente de energía renovable que no emite CO2 ni otros gases de efecto invernadero, contribuyendo así a la reducción de la huella de carbono y al combate del cambio climático.
  • Alta eficiencia energética: Por cada unidad de electricidad utilizada para hacer funcionar el sistema, la aerotermia puede generar hasta cuatro unidades de calor, lo que la convierte en una opción energéticamente eficiente.
  • Versatilidad: La aerotermia proporciona frío y calor y además puede proporcionar agua caliente durante todo el año, lo que la convierte en una solución integral.
  • Ahorro económico: Aunque la inversión inicial puede ser mayor que otros sistemas, a largo plazo la aerotermia permite ahorrar en costos de energía, amortizando así la inversión inicial.

 

Respecto a sus posibles contras, estos son los más importantes:

 

  • Dependencia eléctrica: La aerotermia requiere electricidad para funcionar, lo que puede suponer un aumento en el consumo eléctrico del hogar.
  • Necesidad de espacio exterior: La instalación de una bomba de calor aerotérmica requiere espacio en el exterior del edificio para colocar el equipo, lo que puede ser un inconveniente en espacios reducidos.

Precios de una instalación de aerotermia

El coste de una instalación de aerotermia en España puede variar según factores como el tamaño de la vivienda, la demanda energética, el tipo de sistema (suelo radiante, radiadores, etc.) o la marca del equipo.

 

En general, se estima que la inversión puede oscilar entre 8.000 y 15.000 euros, instalación incluida, aunque al final dependerá de la ubicación geográfica, las necesidades de cada edificio y qué empresa lleve a cabo los trabajos.

 

Aunque puede parecer una inversión inicial significativa, el ahorro energético a lo largo del tiempo suele compensar este tipo de inversión.

Componentes de la aerotermia

Los sistemas de aerotermia cuentan con varios componentes imprescindibles para su buen funcionamiento:

 

  • Bomba de calor: Es el corazón del sistema, ya que se encarga de extraer el calor del aire exterior y transferirlo al interior del edificio.
  • Evaporador: Es el componente donde el refrigerante absorbe el calor del aire exterior y se convierte en gas.
  • Compresor: Se encarga de aumentar la presión y temperatura del refrigerante gaseoso, preparándolo para liberar el calor en la siguiente etapa.
  • Condensador: Aquí, el refrigerante caliente cede su calor al agua del circuito de calefacción o al sistema de agua caliente sanitaria.
  • Válvula de expansión: Regula la presión del refrigerante, permitiendo que vuelva a su estado gaseoso y se inicie un nuevo ciclo.
  • Circuito de distribución: Consta de tuberías y radiadores o suelo radiante, que se encargan de distribuir el calor generado en el interior del edificio.


La aerotermia representa una opción eficiente, sostenible y versátil para la generación de calefacción, refrigeración y agua caliente en España. Además, combinada con una instalación de placas solares, es el sistema ideal para conseguir una climatización perfecta durante todo el año pagando lo mínimo.

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